El colmo “Misoginia y acoso sexual en la FEM por un agente ministerial“
Fecha/hora de publicación: 15 de octubre de 2024 09:41:44
Nancy Jannet es una maestra de educación primaria, que el pasado miércoles fue víctima de un accidente al ser alcanzado el vehículo que manejaba, por otro coche, dentro del circuito universitario.
Los dos conductores tenían asegurado sus coches, y llamaron a sus ajustadores, llegando en ese momento el representante de vialidad, quien procedió a solicitarles sus licencias de manejo y tarjetas de circulación.
En la revisión de documentos, la maestra entregó su licencia de manejo expedida en el Estado de Guerrero y después de una revisión rápida, -cuál perito especializado-, el agente de tránsito identificado con número de placa 549, le dijo a la maestra que la iba a detener por presentar una licencia falsa, que era un delito grave y que la traslada a la dirección de vialidad.
A partir de ese momento, comenzó la peor pesadilla para ella, ya que fue privada de su libertad e incomunicada por más de 23 horas, por órdenes de las autoridades de vialidad, dependiente de la Secretaría de Seguridad Pública.
Primero, la mantuvieron detenida en las instalaciones de tránsito, alrededor de 6 horas, para después trasladarla a la unidad de Delitos Contra el Servicio Público, una dependencia de la fiscalía zona centro en las instalaciones del CERESO ubicado sobre la calle 20 de noviembre, donde nuevamente le fue tomados sus datos, puesta a disposición del ministerio público y después trasladada a las ergástulas de la fiscalía zona centro, donde sí fue atendida por un médico legista y finalmente pasó la noche.
Alrededor de las 10 de la mañana del jueves, los familiares entregaron a la MP, el documento expedido por el Municipio de Buenavista de Cuellar Guerrero, con folio DLP-61/21, firmado por la directora de licencias y permisos vehiculares, Leticia Elizalde Botello, donde confirma que la licencia de manejo con folio A-17858, fue expedida por esa dependencia el 22 de Febrero del 2021; que la licencia es válida, está vigente y fue expedida por la autoridad competente.
Con estas pruebas aportadas, donde se acredita la inexistencia de delito, se iniciaron los trámites para su liberación, no siendo hasta cerca de las 14 horas; es decir casi 24 horas después, cuando finalmente la maestra Nancy Jannet alcanzara su libertad, siendo también notificada antes de salir, de una suspensión definitiva, por la ilegal privación de la libertad, detención, retención e incomunicación, derivada del amparo promovido ante el juzgado 12 de distrito.
La mayor de las sorpresas para la maestra y sus familiares, son la serie de notas periodísticas con fotografías de ella misma teniendo un vehículo de la secretaría de seguridad pública al fondo, que nunca dio su consentimiento para tomarlas, donde establecen sobre “la detección de diversos aspectos, por lo que determinaron que era falsa“.
Este tipo de conductas por parte de los agentes de vialidad, son comunes y frecuentes, particularmente cuando se presenta algún accidente, donde los involucrados no portan algún documento, presentan licencia vencida, les falta la tarjeta de circulación, incluso con la falta de seguro, son privados de su libertad y después de varias horas incomunicados, son objeto de extorsión y cohecho, además de ser puestos a disposición de la autoridad ministerial, cuando ellos deciden y no de inmediato como lo establece la constitución, cuando en muchos de los casos son faltas administrativas, que no requieren ser puestos a disposición de la agencia del Ministerio Público.
En el caso de la maestra Nancy Jannet, se presentó una denuncia ante la autoridad por privación ilegal de la libertad, cohecho y lo que resulte, en contra del agente de vialidad y de quien o quienes resulten responsables, además de presentar una queja ante la CEDH, por la violación grave a sus derechos y a su propia dignidad.
Por lo que respecta a la fiscalía zona centro, es lamentable que como el marido engañado, el último en darse cuenta de lo que sucede en su oficina es el propio fiscal, el maestro Heliodoro Araiza Reyes, quien atiende su encargo cuando tiene tiempo y no cuando su responsabilidad lo requiere.
El colmo “Misoginia y acoso sexual en la FEM por un agente ministerial“
Una de las dependencias emblemáticas de la actual administración, que constituye un ejemplo de efectividad y orgullo para la gobernadora Maru Campos, la constituye la Fiscalía de la Mujer.
En diversas ocasiones, personal de fiscalía de otras entidades, han llegado con la fiscal para intercambiar experiencias y conocer más a fondo la forma en que se abordan diversos casos de violencia familiar y otros delitos cometidos en contra de las mujeres, que son ya replicados en diversas fiscalías estatales.
Sin embargo, para los que cotidianamente coincidimos en sus instalaciones, nos hemos dado cuenta de una serie de acciones de acoso, falta de respeto, proceder irrespetuoso, agresión verbal e incluso violencia física en contra de algunas de las agentes del Ministerio Público que forman parte de la misma FEM.
El factor común en todas, estriba en que son protagonizadas por la misma persona, un agente de la policía Ministerial de nombre Jesús Salvador L. G.
Las quejas, presentadas por las afectadas, la totalidad jóvenes agentes del Ministerio Público, que por su edad y dinámica responsable de su actuar, han esperado una reacción de los niveles superiores del agente, que está a cargo de Guillermo Arturo Zuany Portillo, integrante de la Secretaría de Seguridad Pública, personaje que no ha movido un dedo para poner orden en el comportamiento irregular, ofensivo, grosero, e incluso delictivo de su subalterno.
El hacer mención del cuerpo físico de las jóvenes investigadoras, con un evidente sentido lascivo, el comentar sobre lo que podría hacer con ellas si se permitiera salir con él, incluso el obligar a una más a besarlo, tomando con sus manos el rostro de la Ministerio Público, son apenas parte de las múltiples quejas de su comportamiento.
Lo que resulta incongruente, es que siendo la FEM el espacio de refugio y apoyo para las mujeres violentadas, que sufren menosprecio de sus parejas, violencia sexual en sus relaciones, acoso en el ámbito de sus trabajos, falta de respeto hacia su persona, que son atendidas por personal altamente especializado, en su mayoría jóvenes preparadas, con gran experiencia y compromiso profesional, son ahora victmas de un sujeto que confunde su trabajo con placer, que evidencia una total falta de control de sus impulsos y denota una conducta agresiva, de total menosprecio hacia las mujeres y una grave conducta misógina.
La fiscal, - se asegura-, ha puesto también en conocimiento de los superiores del sujeto de marras, la serie de quejas que le han llegado a su escritorio, pero no se han tomado ningún tipo de acciones, ni siquiera para aperturar una investigación.
El estar más ocupado con su proyecto político personal, que en el cumplimiento de su responsabilidad como Srio de Seguridad Pública, está generando que los integrantes de la dependencia gocen de una gran libertad, que pueden hacer prácticamente lo que les venga en gana, porque finalmente Gilberto Loya Chávez, como consentido de la Gobernadora, los mantiene cubiertos con el manto de la impunidad.
